19 de junio de 2008

DIA 20 (Principes, lobos o ranitas?)

Que difícil decisión......buscar a tu príncipe azul (o rosa o colorao o naranja o verde pistacho, el caso es que sea príncipe y tenga castillo), liarte la manta a la cabeza y enrollarte con el lobo (que aunque un pelin peludo y tosco en modales, tiene que ser una fiera en la cama, jijiji) o pasarte media vida con herpes en la boca de ir besando sapos, ranas, batracios (esto me suena a una canción, no?) para ver si alguno se convierte en algo parecido a eso de "hombre ideal" ,aunque no se para qué, por qué yo no se si hay algún "hombre ideal", los hombres pueden ser "ideales"?........nooooooo!. Como mucho pueden acordarse de vez en cuando de levantar la tapa del wc y luego bajarla (si, chicos, la tapa primero se levanta y luego se baja, sobre todo si en vuestra casa hay mujeres), e intentaran ponerte una lavadora (solo lo intentaran), pero "ideales", no, no lo son.
Los hombres son necesarios, no nos engañemos, los queremos y no podemos vivir sin ellos. Son como la regla, cuando los tenemos nos da un coraje bárbaro pero cuando nos faltan.......nos acojonamos.
Yo he decidido quedarme con el lobo (aunque creo que es una rana disfrazada de lobo), feroz, vicioso, de malas compañias y no muy de fiar...por que?..........pues por que sí, por que algo dentro de mi me dice....."si te vas a quedar soltera de todas formas por lo menos disfruta" jijijiji, pues eso, a disfrutar. Nuestro "hombre ideal" o también llamado el "hombre de nuestra vida" debería de ser siempre con el que estamos en ese momento, sea mas príncipe que rana, o mas lobo que corderete (de estos los menos, jiji) siempre será ese hombre al que acudimos cuando no podemos abrir una botella, al que llamamos cuando encontramos un bicho y al que tiernamente le decimos lo mucho que nos duele la cabeza, jijiijij.
Disfrutar de vuestros lobetes, ranitas y demás bichos y/o personajillos que os rodean y que en el fondo de alguna forma os quieren. Para los que aun no tenemos (bueno casi), no os preocupéis debajo de cualquier piedra aparece siempre un sapo y si no, nos vamos al zoo que seguro que encontramos algo.

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